“Aceptar la cosas que no puedo cambiar y cambiar las cosas que puedo.”
Esta es una versión corta de la oración de Reinhold Niebuhr de Alcohólicos Anónimos, que se utiliza en el movimiento de “AA” o Alcohólicos Anónimos.
El otro día el significado de esta oración se me hizo mucho más claro en cuanto a como yo intento y ayudo a personas a clarificar su vidas diarias.
Parece que la mayoría de los problemas serios que tienen las personas tienen que ver precisamente con asuntos de sus vidas que no pueden ser resueltos. Todos los tenemos. Por ejemplo, todos sabemos que vamos a morir, todos sabemos que tenemos que pagar impuestos y todos sabemos que otros morirán. De lo que no estamos totalmente conscientes es como manejamos estos conocimientos. No nos damos cuenta de que tal vez estamos perdiendo gran parte de nuestras vidas tratando de evadir la muerte y no estamos viviendo la vida. Tal vez no nos damos cuenta de que porque perdimos, por ejemplo, a nuestros padres cuando teníamos ocho años de edad que todavía estamos tratando de “resolver” ese problema y que esta ocupando cada momento de nuestra vida aunque ahora tenemos cincuenta años. Ya que los problemas no tienen solución es como “golpear la cabeza contra la pared” y no darnos cuenta de lo que estamos haciendo. Y como no tienen solución hacemos otra cosa: nos enojamos con el mundo, destruimos nuestro negocio, nuestra familia, nos drogamos o simplemente “nos rendimos.”
Por lo tanto el punto es que la “oración” señala una verdad muy importante. ¿Que podemos hacer? Yo creo que nos suplica que veamos muy bien nuestra vida en una nueva luz y que la examinemos muy seriamente a través de un auto examen y pláticas con otras personas acerca de lo que es posible y lo que no es posible.
A veces se puede hacer algo. Una relación nociva con uno de nuestros padres o con un hermano o hermana quizás puede sanarse. Si las cosas han seguido así durante años y han consumido sus vidas tomen pasos para probar la situación. Sin embargo, si la otra persona no es capaz de responder y continúa lastimándolos, necesitan hacer una reevaluación. Hay dos caminos a seguir. Ahora pueden regresar a sus viejos hábitos, los cuales continuarán aumentándose y probablemente empeorarán; ya que las cosas se alimentan las unas de las otras o a través de una oportunidad uno tal vez se dará cuenta que podemos cambiar aunque el otro quizás no esté listo(a) para cambiar. ¿Esta perdido toda la esperanza para el otro/la otra? No. ¿Por qué? Porque con frecuencia cuando nosotros realmente cambiamos otros frecuentemente cambian.
Ahora yo siempre tengo cuidado para decir que yo no siento que nosotros podemos “escoger” nuestro camino, aun hacía nuestro propio cambio; si no estamos listos emocionalmente, simplemente no estamos listos.
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